Desierto de Ramlat As Sabatain
Atravesando el desierto de Ramlat As Sabatain.
Acompañados de un beduino llevamos a cabo la travesía del desierto; tras llegar al cruce de camino que véis en la primera foto, claramente señalizado en mitad de la nada, y desinflar en parte los neumáticos conseguimos alcanzar los 150 km/hora subiendo y bajando dunas con un dominio de los coches asombroso al igual que del medio identificando qué dunas permitían ir a esa velocidad y cuáles era mejor obviar no fuera que volcáramos; divertido y a la vez emocinante, acampamos para pasar la noche tras zamparnos una cena exquisita; los mayores percances que tuvimos fueron los numerosos pinchazos que hubo, en el caso del 4X4 en el que íbamos nosotros, hasta tres veces hubo que cambiar las ruedas.
Asombrosamente, encontramos un vagón de tren abandonado en un país que nunca ha tenido ferrocarril; tal vez sea una reminiscencia de la ocupación británica de la zona de Adén qué a saber cómo ha llegado aqui.
Observad la gasolinera; los sutidores son auténticos y no digamos el ambiente rodeados de hombre armados con los kalasnikov tal cual.
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